sábado, 3 de marzo de 2012

Primeras impresiones... DIA 1 - Primeras horas



Salí precipitadamente rumbo a Costa Rica tras unas conversaciones telefónicas bastante interesantes con la gente que me ha contratado y abierto las puertas de esta aventura, realmente no pudo ser más casual que precisamente un país donde tengo amistades buenas y profundas publicará una oferta y llegará a mis ojos en el momento justo y adecuado.

La verdad que no sabía exactamente que era lo que me esperaba en este país del que, por regla general poco conocemos por sus dimensiones y ubicación. Así como si uno viaja a Nueva York o Londres sabe bastante aproximadamente lo que le espera en Latino América la historia es otra. Aunque me habían hablado maravillas tanto mis amigos de aquí como los de Barcelona que han visitado el país.




Después de un vuelo bastante plácido en el que aproveche para leerme de nuevo el, ya oxidado, "Manual de Archivística" de Cruz Mundet, entre cuadros de clasificaciones, series, expedientes y modelos (aquí llamados "machotes") de signaturas pase el vuelo. Hubo un par de películas infumables que preferiría olvidar; la nueva versión de los mosqueteros y algo de unos ornitólogos con Steve Martin, Jack Black y Owen Wilson de por medio, bastante bodrio. La presencia tica empezaba a sentirse en el avión con el reparto de café americano y galletas soda (como las galletas pez saladas pero en cuadritas).





Después de 10 horas empezamos el descenso entre nubarrones que no permitían divisar que es lo que teníamos debajo. Cuando atravesamos las nubes tuve, al fin, mi primera impresión de Costa Rica desde el aire... Valles verdes, riachuelos, miles de casitas, vacas y un pequeño aeropuertillo. Al aterrizar el avión nos hicieron esperar debido a que otro vuelo había ocupado nuestro parking...





Era hora ya de tocar tierra firme. Nada más llegar, la primera cara era conocida!! Elvis al que conocí en casa de Beatriz en Barcelona tocaba la guitarra para los turistas, empezar con una cara conocida no tiene precio y confirma que no es un país muy denso en población, después de los saludos una cola enorme para la revisión de pasaportes era lo primero que me aguardaba, entre mis acompañantes de vuelos destacaría que prácticamente no había ningun tico y si multitud de jubilados franceses, alemanes e ingleses, así como una curiosa tipología de turista: los Pocholos con bambas de trekking.

Me esperaba mi primer fin de semana tico....


2 comentarios:

  1. Uoooooo, brutal el fet que t'hagis fet un bloc Sergi! Mola que així podrem seguir les teves aventures ticas :D això és digne dels correus de Chimeno des de Londres o de les aventures de Nuni a través del Fotolog

    Jajajajaja, que bo lo de la tipologia de pocholos de trekking.

    Una abraçada tio

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  2. Hehe, a mi m'ha fet gràcia lo de fer un viatge de tres mil hores a l'altra punta del món i trobar-se algú conegut: "Nada más llegar, la primera cara conocida! Elvis, al que conocí en casa de Beatriz en Barcelona, tocaba la guitarra para los turistas".

    Només faltava dir "Entre los jubilados me pareció ver también a Joan Chouffe i Jordi el del Flabiol, pero no puedo asegurarlo". :)

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